>>116053
>Marisa
<Tu reacción emocional es logica. Aunque un poco… intensa
"¡Es adecuada!" -responde agitándolo un poco más-
Luego es momento de negociar, un trueque. Para salvar a sus abuelos, Marisa propone una de las cosas que más adora, su postre favorito: el pastel de frutilla.
<¿Pastel de frutilla…?
"Ajá, ajá." -asiente con la cabeza-
<suena tentador… Pero no
"¡¿p-pero por qué no?!"
Exclama, mientras su compañero se va a examinar la pizza aún calientita. Marisa se asoma desde detrás de su espalda, curiosa.
"¿Qué pasa?"
<¿Esta pizza… tiene algún significado especial para ustedes? ¿una receta familiar? ¿un símbolo de bienvenida?
"¡Ah, pero por supuesto que sí! Es la pizza de los Pizzas..."
Marisa da un saltito en reversa y hace la pose del David.
"¡Significa amor!"
Luego la pose de la estatua de la libertad.
"¡Tradición!"
Y finalmente la del pensador.
"Familia..."
Luego se para repentinamente, terminando en la pose del hombre de vitruvio.
"¡Es una receta pasada de generación en generación!" -se para normal y levanta un dedo explicando- "nuestro apellido es Pizza, debemos ser buenos haciéndola." -lleva su mano a su barbilla, pronto viéndose pensativa- "hm... ¿pero de dónde vino el apellido...?, ¿acaso sólo fue el destino... o algún ancestro se dio a sí mismo el apellido porque se creía muy bueno haciendo pizzas...? Eso sería un poco cringe..."
<Si ese sentimiento está ligado a la pizza… y los yokais se alimentan de ese tipo de energía emocional. Entonces eso es lo que los mantiene aquí. El cariño, el hogar…
*gaasp* -sorpresa- "¡entonces es eso!" -exclama y frunce el ceño en seriedad- "¡Entonces tenemos que ser super no-cariñosos para que se vayan, entendido!" -dice golpeando su palma con un puño-
Marisa se arremanga la camiseta, lleva el tren superior al frente y los cierra los puños en preparación. La niña camina hacia sus abuelos dando pisotones para verse intimidante y respira hondo, casi soltando vapor al exhalar.
"¡Escúchenme ustedes!" -exclama apuntando a ambos fantasmas con un dedo- "¡A mí me gustan las cosas lindas! Y vaya que ustedes son FEOS. ¡¿por qué no se van de mi pizzeria?!, ¡me caen mal!, ¡MAL!" -exclama, es un comienzo-